SERIE TRULY, IDAHO - RACHEL GIBSON

1. UN AÑO EN TRULY (LOCAMENTE TUYA)

QUERER...

Cuando la bonita peluquera Delaney Shaw regresó a su hogar de la infancia en Truly, Idaho, para asistir a la lectura del testamento de su padrastro, sólo quería una cosa: presentar sus respetos y alejarse lo más rápido posible de allí. Hasta que escuchó algunas de las inesperadas estipulaciones que contenía el documento: como aquella que decía que si quería la herencia tenía que permanecer allí y no tener absolutamente nada que ver con el atractivo Nick Allegrezza... ¡durante todo un año!

...NO SIEMPRE ES PODER.

Diez años antes, Delaney perdió literalmente la cabeza por Nick y por su Harley, e hizo lo que se espera de toda adolescente enamorada... se dejó llevar. Pero en esa época Nick también era un muchacho con las hormonas revolucionadas que creía en el lema de aprovecha el momento y vive la vida, y Delaney aprendió la lección de la manera más dura posible –para su Príncipe Azul tan sólo había sido una amiguita más.

Ahora, Nick sigue tan irresistible como siempre, y en el momento en que se vuelven a encontrar las chispas saltan entre ellos.

Va siendo hora de que Delaney decida si Nick es realmente el hombre de su vida.

2. LO QUE AMO DE TI

DAME UN D-E-S-C-A-N-S-O

La ex animadora de secundaria, Natalie Cooper, una vez pudo sacudir sus pompones con todo lo mejor de ellos. Pero ha pagado por toda aquella popularidad, su esposo ha huido con lo que quedaba del dinero de los dos y una rubia tetona cabeza hueca de veintiún años de edad llamada Tiffany. Dejando a Natalie para que se haga cargo de una tienda de fotos (y teniendo que ver algunas fotos, que bueno ella, ¡realmente no debería!) y tratando de ser una buena madre.

DAME UN T-I-R-O.

Luego ella llega y apunta al pecho de Blake Junger. Exiliado en una remota cabaña en Truly, Idaho, Blake no quiere nada con nadie. De hecho, está determinado a luchar con sus demonios y ganarles a su propia manera. Pero con lo que no contaba era con una pequeña visitante de cinco años de edad del tamaño de una pinta o con que Natalie, la deliciosa curvilínea madre de la niña, rompiera sus barreras.

DAME T-U-C-O-R-A-Z-O-N.